
El gobernador de San Luis implosionó su propio frente y metió la mano en La Libertad Avanza, dejando un oficialismo sin aliados y un libertarismo vacío.
El Mosquito recorrió de punta a punta la avenida y la intervención municipal deja mucho que desear. 200 millones para tapar algunos baches y un show que incluyó al gobernador, Claudio Poggi.
Actualidad09 de abril de 2025En campaña, las gestiones suelen inflar los números para maquillar lo poco que hacen. Pero lo de Jorge Gastón Hissa ya roza el surrealismo. Esta vez no solo vendió humo, sino que hasta logró que el mismísimo Claudio Poggi lo respalde en el escenario de una obra fantasmal. Sí, el gobernador fue parte del acto de inauguración de una repavimentación que, en los hechos, no existe.
Según el relato oficial, se invirtieron 200 millones de pesos para asfaltar 21 cuadras de Aristóbulo del Valle, desde Santa Fe hasta Sucre. Sin embargo, con solo recorrer la avenida con los ojos abiertos y sin necesidad de usar drones ni GPS, la verdad estalla en la cara: solo 6 cuadras recibieron algún tipo de intervención, y en la mayoría de los casos se trata de simples parches, no de una repavimentación real.
Y no es solo una exageración, es una estafa discursiva. Hissa no repavimentó cuadras, rellenó pedazos. Lo que su gabinete cuenta como “una cuadra” son apenas algunos paños sueltos. La avenida sigue tan rota como antes, con los mismos cráteres que ponen a prueba amortiguadores, y con las pérdidas cloacales adornando las esquinas.
Entonces, la pregunta cae por peso propio: ¿Dónde están las otras 15 cuadras que figuran en el relato oficial? ¿En qué parte de la ciudad paralela que habita el intendente se ejecutaron esas obras?
Desde que asumió, Hissa ha hecho del delirio una forma de gestión. Anuncia lo que no hace, inaugura lo que no existe y sobrevende lo que apenas arranca. Su problema no es la desinformación, sino la desconexión con la realidad. Vive en una ficción en la que su administración es modelo, sus obras son históricas y su liderazgo es incuestionable. Pero basta con caminar unas cuadras para que el decorado se caiga.
No es la primera vez que el intendente vende espejitos de colores. Pero esta vez lo hizo en cadena, con acto oficial, cartelitos de obra, presencia del gobernador y todo el circo montado. Una puesta en escena cara, financiada con fondos públicos, para tapar apenas algunos baches.
La pregunta final no es dónde están las cuadras prometidas, sino hasta cuándo van a seguir subestimando la inteligencia de los vecinos. Porque los baches están ahí y no hay relato que los tape.
El gobernador de San Luis implosionó su propio frente y metió la mano en La Libertad Avanza, dejando un oficialismo sin aliados y un libertarismo vacío.
En un fallo express de la jueza Servini, el espacio libertario quedó bajo intervención nacional. Carlos González D’Alessandro denunció un atropello y apuntó contra Claudio Poggi y Eduardo “Lule” Menem.
El partido de Adolfo Rodríguez Saá terminó sin lista propia y expulsó al ex intendente de Juana Koslay por presentarse en otro frente. Una maniobra que exhibe el rol subordinado del espacio al gobernador Claudio Poggi.
Denunciaron que les impusieron nombres que no tienen nada que ver con los libertarios de San Luis. Bronca con el poggismo y una jugada que salió muy mal.
Editorial mosquitera.
La diputada nacional renunció a su postulación como suplente en la lista del justicialismo puntano y respaldó sin matices a Jorge “Gato” Fernández y Gloria Petrino. Reafirmó que la prioridad es la unidad para enfrentar el avance libertario.
El propio gobierno reconoce que con el ritmo de construcción previsto, la solución habitacional para las más de 66 mil familias inscriptas llegaría recién en 60 años. Una ley votada por todos, que patea la promesa de campaña y consolida la política de la emergencia como estrategia de gestión.
A casi dos años de gestión, el intendente de San Luis convierte tareas de mantenimiento en actos de gobierno, mientras la capital se deteriora entre cloacas desbordadas, basura acumulada y un centro tomado por manteros.
Denunciaron que les impusieron nombres que no tienen nada que ver con los libertarios de San Luis. Bronca con el poggismo y una jugada que salió muy mal.
El partido de Adolfo Rodríguez Saá terminó sin lista propia y expulsó al ex intendente de Juana Koslay por presentarse en otro frente. Una maniobra que exhibe el rol subordinado del espacio al gobernador Claudio Poggi.
En un fallo express de la jueza Servini, el espacio libertario quedó bajo intervención nacional. Carlos González D’Alessandro denunció un atropello y apuntó contra Claudio Poggi y Eduardo “Lule” Menem.
El gobernador de San Luis implosionó su propio frente y metió la mano en La Libertad Avanza, dejando un oficialismo sin aliados y un libertarismo vacío.
Daniel Piñeda, subdirector de Ingresos Públicos, intentó apuntar contra la gestión anterior, pero concejales justicialistas lo dejaron expuesto con munición gruesa sobre los desmanejos actuales del municipio.