
El gobernador de San Luis implosionó su propio frente y metió la mano en La Libertad Avanza, dejando un oficialismo sin aliados y un libertarismo vacío.
El gobernador está 20 de 24 integrantes en el ranking, mientras el jefe comunal sigue en caída libre y se ubica en el puesto 15 de 24.
Actualidad11 de marzo de 2024En 100 días, el proyecto político que gobierna la provincia quemó las naves. Despidos, sueldos en cuotas son la receta de un ajuste que los ciudadanos no acompañan. Tanto el gobernador, Claudio Poggi, como el intendente, Gastón Hissa, se ubican entre los dirigentes con peor imagen, según la tradicional encuesta mensual de CB Consultora.
El informe de marzo, ubica al gobernador en el puesto 20 de 24 mandatarios a nivel imagen. Los números parecen seguir bajando y en los próximos meses podría llegar a los últimos dos puestos del ranking. La realidad económica de la provincia, la falta de medidas concretas y la retracción de los sueldos, son puntos desfavorables para la imagen de Poggi.
A pesar que desde el Estado provincial se gastan fortunas en publicidad en redes sociales, la gestión del primer mandatario de San Luis sigue entre las peores.
La realidad en la capital puntana es peor. Abandono, desidia y una marcada violencia institucional son las características del gobierno de Gastón Hissa. Su malogrado discurso en el Concejo Deliberante todavía le cobra deudas.
En un intento desesperado, Hissa salió a “mostrarse”, incluso hasta se prestó a juegos con algunos medios que rozaron lo dantesco, como fingir llegar al Municipio y mirar por la ventana la realidad de la Ciudad, algo que claramente no es lo que sucede en la realidad.
También la comunicación del Municipio, con estrategias que no son más que una burda copia de la gestión anterior, busca retratar a un intendente presente que por ahora no dio ninguna respuesta a los cientos de problemas que tiene la capital puntana y solo se limitó a culpar la “pesada herencia”.
No hay publicidad ni discurso de victimización que valga a la hora de enfrentar a los ciudadanos. Por más denuncias y juicios que ambos mandatarios intenten llevar a cabo, con más objetivos mediáticos que judiciales, los números no mienten y la caída en imagen promete seguir creciendo.
El gobernador de San Luis implosionó su propio frente y metió la mano en La Libertad Avanza, dejando un oficialismo sin aliados y un libertarismo vacío.
En un fallo express de la jueza Servini, el espacio libertario quedó bajo intervención nacional. Carlos González D’Alessandro denunció un atropello y apuntó contra Claudio Poggi y Eduardo “Lule” Menem.
El partido de Adolfo Rodríguez Saá terminó sin lista propia y expulsó al ex intendente de Juana Koslay por presentarse en otro frente. Una maniobra que exhibe el rol subordinado del espacio al gobernador Claudio Poggi.
Denunciaron que les impusieron nombres que no tienen nada que ver con los libertarios de San Luis. Bronca con el poggismo y una jugada que salió muy mal.
Editorial mosquitera.
La diputada nacional renunció a su postulación como suplente en la lista del justicialismo puntano y respaldó sin matices a Jorge “Gato” Fernández y Gloria Petrino. Reafirmó que la prioridad es la unidad para enfrentar el avance libertario.
El propio gobierno reconoce que con el ritmo de construcción previsto, la solución habitacional para las más de 66 mil familias inscriptas llegaría recién en 60 años. Una ley votada por todos, que patea la promesa de campaña y consolida la política de la emergencia como estrategia de gestión.
A casi dos años de gestión, el intendente de San Luis convierte tareas de mantenimiento en actos de gobierno, mientras la capital se deteriora entre cloacas desbordadas, basura acumulada y un centro tomado por manteros.
Editorial mosquitera.
Denunciaron que les impusieron nombres que no tienen nada que ver con los libertarios de San Luis. Bronca con el poggismo y una jugada que salió muy mal.
El partido de Adolfo Rodríguez Saá terminó sin lista propia y expulsó al ex intendente de Juana Koslay por presentarse en otro frente. Una maniobra que exhibe el rol subordinado del espacio al gobernador Claudio Poggi.
En un fallo express de la jueza Servini, el espacio libertario quedó bajo intervención nacional. Carlos González D’Alessandro denunció un atropello y apuntó contra Claudio Poggi y Eduardo “Lule” Menem.
El gobernador de San Luis implosionó su propio frente y metió la mano en La Libertad Avanza, dejando un oficialismo sin aliados y un libertarismo vacío.