ROSCA Y TONGO 35

ActualidadEl sábadoRedacciónRedacción
7 de junio - día del periodista (5)

DEMASIADO ENOJADO

El secretario de Personas con Discapacidad volvió muy enojado de sus vacaciones en Dubai y soltó toda su bronca en un video que demuestra que la filtración de su aventura en medio oriente, le dolió y mucho. 

Mientras las personas con discapacidad la pasan muy mal tanto en el país, como en San Luis, el funcionario de Poggi se fue de shopping a una de las ciudades más caras del mundo. Su justificación fue un viaje a Israel que nunca llegó a destino y que los fondos del paseo turístico todos fueron de la embajada. 

No bien se filtró la noticia, la agencia del gobierno salió a las apuradas a intentar lavar la ropa de Giraudo. Tanto que tuvieron que movilizar parte del equipo de prensa para preparar una nota a modo de paraguas del mercedino. 

Pero lo peor llegó al otro día. Cuando en radio, Giraudo además de justificarse, tiró tierra al gobernador y su gestión por el escaso presupuesto con el que cuenta el área de Discapacidad. 

Su viaje no pasó desapercibido para las asociaciones de personas con discapacidad que lo repudiaron inmediatamente. Esto y las cientos de críticas, llevaron a que el secretario grave un video muy ofuscado, tirando denuncias inchequeables y no nombrando a nadie, por miedo quizás ??

La realidad es que otra vez un funcionario poggista demuestra su total desconexión con la ciudadanía, otro que lanza agravios por redes que no puede comprobar y que queda expuesto con una violenta reacción.

Como dirían los pibes hoy en día, “Entró la balubi”....

NO ACLARES QUE OSCURECE

De un tiempo acá, la gestión de Diego Masci solo se dedica a intentar desmentir, ocultar o aclarar situaciones con el gobernador o algún funcionarios. Es decir, la Comunicación gubernamental mutó del relato impuesto a la defensa irrestricta de los errores no forzados. 

Si bien esto puede parecer una buena acción, la realidad es que el gobierno queda mal parado al contestar cuestiones que no tienen explicación o que no son creíbles. Pasó con la Policía, todo el mundo sabía de la crisis interna que se vive en la fuerza, que hizo prensa oficial, lo intentó ocultar.  A las horas se conocieron los cambios. 

Masci está obsesionado con el Diario de la República, sale a contestarle cada vez que puede. Primero lo hacía en twitter, luego empezó a hacerlo desde la agencia de noticias. El rey de las Fake news ahora vende que sale a cazarlas, supuestamente. 

Esta semana pasó lo mismo con el viaje de Luis Giraudo. El gobierno salió a aclarar lo que nadie le pidió. Si no se hubiera filtrado la noticia, Masci y compañía nunca habrían informado ni del viaje ni de los supuestos gastos solventados por la Embajada de Israel, país al que ni siquiera llegó. 

Al gobierno no le gusta jugar en el barro comunicacional que ellos mismos crearon. Todo un signo de una gestión que lleva casi dos años y todavía no se acomodó. 

UN SHOW DESGASTADO

El intendente Jorge Gastón Hissa volvió al ruedo como le gusta, con tijera en mano, sonrisa falsa y una cinta que ya fue cortada. Esta vez fue la Plaza Azul, una obra que no solo había sido inaugurada por la gestión anterior, sino que fue descuidada hasta caer en la ruina bajo su propio mandato. Pero en la escenografía de cartón pintado del jefe comunal, todo vale con tal de parecer que se está haciendo algo.

La lógica es simple, mientras la basura se acumula como si fuera parte del patrimonio cultural y el agua servida serpentea las calles como un nuevo atractivo turístico, él prefiere mirar a cámara y repetir la escena, agregar algún banquito o pintar un tobogán para vender una reinauguración. 

Como si nadie recordara que hace apenas meses se escondió en plena campaña, para no espantar más votos de los que ya perdía el oficialismo. Ahora reaparece con una obra que ni siquiera es nueva, como quien revende un regalo usado.

La gestión de Hissa parece escrita por un guionista sin presupuesto y con menos creatividad que NIK, siempre el mismo libreto, las mismas promesas, la misma plaza, pero cada vez con menos público. Gobernar no es montar un show, aunque él insista en usar a San Luis como su escenografía. Mientras tanto, la ciudad huele mal, se inunda y se cae a pedazos. Pero eso no se ve en la foto.

DOSEP ARDE 

La interna del poggismo tiene su propio laboratorio de caos, y se llama DOSEP. Mientras la salud de los afiliados cuelga de un hilo, adentro se cuece una olla a presión donde los únicos que siguen firmes son los empresarios amigos del poder. Las empresas ligadas a José Manuel Jerez, amigo privilegiado del ministro Ordoñez, siguen facturando mientras la obra social se cae a pedazos y los funcionarios —los que todavía no se fueron— caminan mirando al piso.

La última en abandonar el barco fue Beatriz Barrios, gerente de Servicios, que se hartó de la parálisis institucional y del juego sucio que se cocina en los pasillos. No es la primera ni será la última. Ya se volvió costumbre ver cómo los de segunda y tercera línea se desgastan dando explicaciones imposibles, mientras los de arriba se blindan detrás del relato del ajuste necesario. Una fuente interna lo resumió mejor que nadie: “acá adentro nadie quiere ser el próximo cadáver político”.

En los hechos, DOSEP dejó de ser una obra social y pasó a ser una escena del crimen. Los pacientes esperan, los prestadores se hartan, y los responsables juegan al distraído. El ajuste sigue siendo la única política sanitaria de este gobierno, y la salud, una moneda más en la contabilidad del ajuste. Nadie se hace cargo, pero todos cobran.

Te puede interesar
Lo más visto