
Mientras Moriñigo le pega a Milei por el presupuesto universitario, en San Luis armó un evento con lujos y vuelos privados con el aval del gobierno de Poggi.
El 1 de febrero se produjo la renuncia de funcionarios de la Secretaría de Hacienda que se mostraron disconformes con la realización de un nuevo pago de viáticos.
Actualidad04 de febrero de 2024La Municipalidad de San Luis no tiene paz y los problemas surgen desde sus entrañas. A 50 días de la asunción de Gastón Hissa, la gestión solo es conocida por sus escándalos. Uno de ellos, es el posible pago de sobresueldos que se han realizado consecutivamente, el propio jefe comunal y algunos integrantes de su gabinete.
El primero de febrero, la situación tuvo un nuevo capítulo. Según se conoció, lo que comenzó como una reunión rutinaria de la Secretaría de Hacienda, encabezada por Fabiana Malamud, terminó en un nuevo escándalo que podría generar más entredichos a una gestión colmada de incertidumbres en el manejo de los fondos públicos.
En dicha reunión, Malamud le habría pedido a su equipo la disposición de un nuevo pago de viático al intendente y a su círculo cercano (ver nota). La secretaria les garantizó que no habría más filtraciones de datos, mediante un memorándum que ordenaba cambiar las claves de accesos a todos los sistemas y una penosa cacería de brujas interna. Sin embargo, el equipo se negó rotundamente a participar en esta práctica, considerándola no solo penalmente reprochable, sino también injusta para la familia municipal que viene soportando salarios desdoblados y sin aumentos.
Esta negativa desencadenó una reacción airada por parte de Malamud, quien les solicitó la renuncia a todos. Ante esto, la contadora general, Patricia Vallesi, y la subtesorera presentaron su renuncia indeclinable. A su vez, en medio del caos, la contadora general solicitó la presencia del Tribunal de Cuentas Municipal para documentar el estado financiero de la Comuna al momento de la transición.
No obstante, el arribo de los miembros Cianchino y Pagano se vio impedida por un operativo policial ordenado por el intendente, que les impidió el acceso al edificio y los dejó esperando en una carpa montada para controlar a las decenas de despedidos que van diariamente a pedir su reincorporación.
Esta llegada frustrada le habría servido a Malamud para convencer a dos funcionarios que se quedaran, con un aumento de sueldo y de categoría, Ana Rodríguez, tesorera quién empezaría a cobrar como subsecretaria, y el actual director de Presupuesto, Amadeo Vera, quién comenzará a cobrar como director general. La maniobra de la responsable de Hacienda, tendría un solo fin, evitar que quede registrado un saldo consolidado que asciende a más de 1.500 millones de pesos (luego de haber abonado los haberes de enero), lo que pondría en conflicto el actual relato de Municipio devastado que desesperadamente intenta instalar Hissa.
El caso de los viáticos “truchos” pone en jaque la transparencia, la equidad en el manejo de los fondos públicos y la falta de ética de una gestión que tiene como víctimas tanto a los empleados municipales como a los vecinos.
Mientras Moriñigo le pega a Milei por el presupuesto universitario, en San Luis armó un evento con lujos y vuelos privados con el aval del gobierno de Poggi.
A 20 días de las elecciones, volverán a anotar gente como ya hizo el gobernador en otras elecciones. No hubo anuncios salariales, ni de obras de importancia.
El gobierno aumentó la partida para el PANE. Además, politiza las escuelas mandando funcionarios a “controlar”, generando malestar entre docentes y trabajadores.
El gobierno de Claudio Poggi atraviesa su momento de mayor tensión política, y la razón tiene nombre y apellido: Alberto Rodríguez Saá.
Asegura que su gestión repavimentó más de 100 calles, pero en la realidad los vecinos dicen no verlas. Denuncian accidentes por los baches y se multiplican las críticas en las redes sociales.
En una de las reuniones de gabinete más calientes, el gobernador advirtió que Rodríguez Saá todavía tiene poder y pone nerviosa a toda la gestión.
Insólito e increíble. Eugenia Gallardo dijo en el canal oficial que el gobernador la nombró luego de mandarle algunos tips sobre el plan. Docentes y padres preocupados por la improvisación estatal.
El gobierno de Claudio Poggi atraviesa su momento de mayor tensión política, y la razón tiene nombre y apellido: Alberto Rodríguez Saá.
El gobierno aumentó la partida para el PANE. Además, politiza las escuelas mandando funcionarios a “controlar”, generando malestar entre docentes y trabajadores.
A 20 días de las elecciones, volverán a anotar gente como ya hizo el gobernador en otras elecciones. No hubo anuncios salariales, ni de obras de importancia.
Mientras Moriñigo le pega a Milei por el presupuesto universitario, en San Luis armó un evento con lujos y vuelos privados con el aval del gobierno de Poggi.