
El gobernador de San Luis implosionó su propio frente y metió la mano en La Libertad Avanza, dejando un oficialismo sin aliados y un libertarismo vacío.
Volvió a arrastrar al Legislativo al ridículo, interrumpió, insultó y agredió a una edil. Otro capitulo más de una historia de transfuguismo y bochornos por doquier.
Actualidad19 de junio de 2025Si el Concejo Deliberante de San Luis fuera una comedia, Laura Sánchez estaría a cargo del papel del bufón y uno muy malo. El problema es que no hay gracia, solo bochorno institucional y transfuguismo. La presidenta del cuerpo, ungida por Gastón Hissa para que el caos tenga firma, volvió a superarse, este jueves usó la palabra —no para guiar la sesión— sino para denigrar a una concejala, metiéndose incluso con su familia. El resultado fue el previsible, la sesión se cayó por falta de profesionalismo, de respeto y, sobre todo, de conducción.
El currículum de Sánchez habla solo, asumió su banca traicionando al bloque que la llevó (no resistió ni 5 minutos en venderse), repartió contratos entre jugadores de sus clubes deportivos, y convirtió al recinto en una mezcla de cancha de futsal y ring de insultos.
Nunca supo conducir, pero ahora además cree que puede censurar y agredir a quienes piensan distinto. No le quedó grande la presidencia, le quedó monumental. Y en diciembre, cuando se le acabe el poder prestado, es una gran candidata a pasar a la historia legislativa como la presidenta más patética. Sus hechos avalan este mote y los trabajadores del concejo ya lo dicen sin tapujos por los pasillos.
El trasfondo político no sorprende, Hissa la quiere ahí. No por brillante, sino por funcional. Cuanto más impresentable sea el Concejo, más podrá el intendente culpar a otros por su propia parálisis y sus errores.
El gobernador de San Luis implosionó su propio frente y metió la mano en La Libertad Avanza, dejando un oficialismo sin aliados y un libertarismo vacío.
En un fallo express de la jueza Servini, el espacio libertario quedó bajo intervención nacional. Carlos González D’Alessandro denunció un atropello y apuntó contra Claudio Poggi y Eduardo “Lule” Menem.
El partido de Adolfo Rodríguez Saá terminó sin lista propia y expulsó al ex intendente de Juana Koslay por presentarse en otro frente. Una maniobra que exhibe el rol subordinado del espacio al gobernador Claudio Poggi.
Denunciaron que les impusieron nombres que no tienen nada que ver con los libertarios de San Luis. Bronca con el poggismo y una jugada que salió muy mal.
Editorial mosquitera.
La diputada nacional renunció a su postulación como suplente en la lista del justicialismo puntano y respaldó sin matices a Jorge “Gato” Fernández y Gloria Petrino. Reafirmó que la prioridad es la unidad para enfrentar el avance libertario.
El propio gobierno reconoce que con el ritmo de construcción previsto, la solución habitacional para las más de 66 mil familias inscriptas llegaría recién en 60 años. Una ley votada por todos, que patea la promesa de campaña y consolida la política de la emergencia como estrategia de gestión.
A casi dos años de gestión, el intendente de San Luis convierte tareas de mantenimiento en actos de gobierno, mientras la capital se deteriora entre cloacas desbordadas, basura acumulada y un centro tomado por manteros.
Editorial mosquitera.
Denunciaron que les impusieron nombres que no tienen nada que ver con los libertarios de San Luis. Bronca con el poggismo y una jugada que salió muy mal.
El partido de Adolfo Rodríguez Saá terminó sin lista propia y expulsó al ex intendente de Juana Koslay por presentarse en otro frente. Una maniobra que exhibe el rol subordinado del espacio al gobernador Claudio Poggi.
En un fallo express de la jueza Servini, el espacio libertario quedó bajo intervención nacional. Carlos González D’Alessandro denunció un atropello y apuntó contra Claudio Poggi y Eduardo “Lule” Menem.
El gobernador de San Luis implosionó su propio frente y metió la mano en La Libertad Avanza, dejando un oficialismo sin aliados y un libertarismo vacío.