
El gobernador de San Luis implosionó su propio frente y metió la mano en La Libertad Avanza, dejando un oficialismo sin aliados y un libertarismo vacío.
Un grupo de libertarios encabezados por Rodolfo Negri, inscribió un frente distinto al de Carlos D'Alessandro, dejando en evidencia la interna que hay entre los dirigentes de Milei en San Luis.
Actualidad12 de marzo de 2025A pocas horas del cierre de frentes, el debut de los libertarios en las elecciones provinciales comenzará con una fractura política. Carlos D'Alessandro, inscribió su frente "Las Fuerzas del Cielo" y se auto proclamó la representación puntana de Milei en la contienda. Pero en el último suspiro del miércoles, Rodolfo Negri pateó el tablero y presentó su propia alianza, quedándose con el sello de La Libertad Avanza. De esta manera, el espacio libertario competirá contra sí mismo.
El debut de los libertarios como fuerza política en San Luis no pudo ser más accidentado. En la Justicia Electoral hubo más de una cara larga de dirigentes libertario que no entendieron la fractura.
Desde el entorno de D'Alessandro acusan a Negri de ser un caballo de Troya del poggismo, con la misión secreta de dinamitar la estructura desde adentro. Del otro lado, la narrativa es que D'Alessandro cerró listas a espaldas de todos y que su plan de renunciar a su banca para encabezar la boleta dejó a muchos con el ceño fruncido.
Con este panorama, lo que iba a ser un lanzamiento triunfal de los libertarios se convirtió en una guerra de facciones antes siquiera de definir candidatos. Mientras Milei desde Buenos Aires hace equilibrio ante las distintas cuestiones que golpean a su gestión, en San Luis su tropa local le dará otro dolor de cabeza.
El gran interrogante es quién se quedará con la bendición presidencial y quienes saldrán heridos de una guerra interna que hasta el miércoles era inesperada.
El gobernador de San Luis implosionó su propio frente y metió la mano en La Libertad Avanza, dejando un oficialismo sin aliados y un libertarismo vacío.
En un fallo express de la jueza Servini, el espacio libertario quedó bajo intervención nacional. Carlos González D’Alessandro denunció un atropello y apuntó contra Claudio Poggi y Eduardo “Lule” Menem.
El partido de Adolfo Rodríguez Saá terminó sin lista propia y expulsó al ex intendente de Juana Koslay por presentarse en otro frente. Una maniobra que exhibe el rol subordinado del espacio al gobernador Claudio Poggi.
Denunciaron que les impusieron nombres que no tienen nada que ver con los libertarios de San Luis. Bronca con el poggismo y una jugada que salió muy mal.
Editorial mosquitera.
La diputada nacional renunció a su postulación como suplente en la lista del justicialismo puntano y respaldó sin matices a Jorge “Gato” Fernández y Gloria Petrino. Reafirmó que la prioridad es la unidad para enfrentar el avance libertario.
El propio gobierno reconoce que con el ritmo de construcción previsto, la solución habitacional para las más de 66 mil familias inscriptas llegaría recién en 60 años. Una ley votada por todos, que patea la promesa de campaña y consolida la política de la emergencia como estrategia de gestión.
A casi dos años de gestión, el intendente de San Luis convierte tareas de mantenimiento en actos de gobierno, mientras la capital se deteriora entre cloacas desbordadas, basura acumulada y un centro tomado por manteros.
Editorial mosquitera.
Denunciaron que les impusieron nombres que no tienen nada que ver con los libertarios de San Luis. Bronca con el poggismo y una jugada que salió muy mal.
El partido de Adolfo Rodríguez Saá terminó sin lista propia y expulsó al ex intendente de Juana Koslay por presentarse en otro frente. Una maniobra que exhibe el rol subordinado del espacio al gobernador Claudio Poggi.
En un fallo express de la jueza Servini, el espacio libertario quedó bajo intervención nacional. Carlos González D’Alessandro denunció un atropello y apuntó contra Claudio Poggi y Eduardo “Lule” Menem.
El gobernador de San Luis implosionó su propio frente y metió la mano en La Libertad Avanza, dejando un oficialismo sin aliados y un libertarismo vacío.